Muralla medieval de la villa de Grado

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Descripción

La villa de Grado (capital del concejo de igual nombre) es una de las polas medievales fundadas ex novo por Alfonso X el Sabio. Su privilegio de pola se remonta a una fecha anterior al 3 de marzo de 1256. Se incluye dentro de lo que se denominan pueblas cercadas, al estar su entorno bordeado por una muralla. El recinto intramuros era reducido y se extendía por lo que hoy conocemos como calle Cerro de la Muralla, seguía por el costado izquierdo del actual edificio del Ayuntamiento —en donde se conservan restos—, giraba por la actual travesía Álvaro Fernández de Miranda y Manuel Pedregal para enlazar con el punto de partida por la fachada norte del palacio Miranda-Valdecarzana. Del trazado viario medieval probablemente se conserven dos calles, enmarcadas por el solar de la antigua iglesia: la travesía del Palacio Valdecarzana y la vía, sin nombre, que discurre paralela entre la verja de cierre de la rectoral y la fachada este de la capilla de los Dolores.

Esta muralla permaneció en pie hasta 1810 (fecha en que fue derruida para evitar que sirviera de refugio a los franceses, según nos cuenta Fernández de Miranda). Tenía dos puertas de acceso: una situada al norte, comunicando con el actual parque de San Antonio y con la vía costera, y la otra, derribada en 1866, con la plaza del Ayuntamiento y con las vías que se dirigían al este y al oeste; esta última parece haber sostenido la antigua torrecilla del reloj.

Dentro del recinto amurallado, y ocupando el solar que actualmente invade la casa rectoral, se encontraba la antigua iglesia románica. Álvarez de Miranda dice de ella que tenía una sola nave, arco de triunfo, presbiterio y cubierta con bóveda de cañón. Según el mismo autor, a pesar de haber sufrido varias restauraciones, aún conservaba las basas y los capiteles de las columnas, así como la entrada lateral con ajedrezado en la rosca del arco; en su interior, frente al altar mayor, había sepulcros, uno de ellos llevaba una inscripción latina de los Fernández de Miranda. Adosada a la iglesia, en su muro sur, se encontraba la capilla del Pardo, de propiedad particular, en la que se podía ver el escudo nobiliario de la familia.

Actualmente, son los restos de esta muralla los únicos vestigios de época medieval que se conservan dentro de la villa, pudiendo observarse parte de ellos en la calle Tras el Ayuntamiento, en el que permanece en pie un ancho muro de sillarejo que mira hacia el río y se curva en dirección a la pared izquierda de la Casa Consistorial. Álvaro Fernández de Miranda dice de ella que «presentaba el muro metro y medio de espesor, variando su altura entre seis y siete metros, y el foso contaba de ancho seis y dos de profundidad, aproximadamente».

Fuente: Ayuntamiento de Grado.

Concejo de Grado

Cruce de caminos —el de Santiago y el Camín Real de la Mesa—, fértiles huertas, minería, arquitectura medieval, religiosa, palaciega e indiana, gentes abiertas y comerciantes, mercados y fiestas, dulces… Todo es posible en Grado.

Los concejos (municipios) que limitan con el Concejo de Grado son: Belmonte de Miranda, Candamo, Las Regueras, Oviedo, Proaza, Salas, Santo Adriano y Yernes y Tameza. Cada uno de estos concejos (municipios) comparte fronteras geográficas con Grado, lo que implica que comparten límites territoriales y pueden tener interacciones políticas, sociales y económicas entre ellos.

Comarca del Camín Real de la Mesa

Fue el sueño de un Imperio, el romano, que ambicionaba las riquezas de la tierra y la bondad de sus gentes; es cruce de caminos —el de la Mesa, el de Santiago y la Senda del Oso—. Es el hogar de los osos pardos y Reserva de la Biosfera —la de las Ubiñas-La Mesa—.

La comarca está conformada por uno o varios concejos (municipios). En este caso: Belmonte de Miranda, Candamo, Grado, Las Regueras, Proaza, Quirós, Santo Adriano, Somiedo, Teverga y Yernes y Tameza. Los concejos representan las divisiones administrativas dentro de la comarca y son responsables de la gestión de los asuntos locales en cada municipio.

Conocer Asturias

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